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El artista, tras su primera canción, quiso recordar a "esos canarios bellísimos" que perdieron la vida en el accidente de Barajas
M.A. AUTERO SANTA CRUZ DE TENERIFE El cantante español más internacional, Julio Iglesias, actuó anoche ante más de 11.000 espectadores en Santa Cruz de Tenerife. El escenario escogido fue el Centro Internacional de Ferias y Congresos de Tenerife, que casi se llenó de seguidores del artista que, desde las gradas, las sillas frente al escenario o la zona habilitada para la zona de pie, no dejaron de cantar y vibrar a cada frase de Julio y a cada éxito que interpretaba.
El Recinto Ferial contó para esta velada con una iluminación y sonido elegidos por el propio artista, que ofreció más de dos horas de concierto donde Julio Iglesias volvió a traer a la Isla su repertorio de nuevas, pero también clásicas canciones, de una discografía realizada durante 40 años, porque en 2008, el cantante cumplirá 40 años sobre los escenarios, desde que aquel joven que iba para portero del Real Madrid decidiera dar un giro hacia el mundo de la canción tras una lesión.
Julio Iglesias volvió anoche a visitar Tenerife de la mano de Rolo Producciones y patrocinado por el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través de su programa Santa Cruz + Viva y el Cabildo Insular de Tenerife. Pero antes de que Julio Iglesias saltara sobre el escenario actuó Anissa Gathers, que ha sustituido recientemente a Xiomara Laugart para encarnar a la mítica reina de la salsa, Celia Cruz. Con un estruendoso ¡Azúcaaaaar!, la artista interpretó dos temas de la recordada artista cubana para calentar los motores del respetable que prácticamente ya había ocupado casi todas las plazas en las gradas y la sillería.
Luego le tocó el turno a Julio Iglesias, quien no dudó en recordarle a quienes habían asistido a verle y, sobre todo escucharle, que Tenerife y Canarias es "uno de los rincones de España que siempre llevo en mi corazón, porque en esta tierra me siento como en mi casa". Y es que al sempiterno Julio, "le va Tenerife", como recordó en los intervalos que precedían a cada canción.
Cuando el artista terminó de interpretar su primera canción y dijo que "esta noche quiero recordar a esos canarios bellísimos que desgraciadamente han perdido la vida hace tres días" el público le respondió con una sonada ovación y se ganó, de ahí hasta el final de la noche, el corazón de todos. Julio no perdió la ocasión, antes de su tercer tema, para decir que "quiero decirles algo que muchos no saben y es que, hace muchos años, cuando yo era un chaval, venía mucho a veranear a Tenerife: me encanta esta Isla, los tinerfeños y los canarios", pudo escuchársele antes de que el público tapara su voz con los aplausos.
Y no hubo dos sin tres, ni tres sin cuatro ni cuatro sin cinco... las veces que el artista hacía referencia a la Isla hasta que llegó eso de "Tenerife, me va, me va, me va!".
M.A. AUTERO SANTA CRUZ DE TENERIFE El cantante español más internacional, Julio Iglesias, actuó anoche ante más de 11.000 espectadores en Santa Cruz de Tenerife. El escenario escogido fue el Centro Internacional de Ferias y Congresos de Tenerife, que casi se llenó de seguidores del artista que, desde las gradas, las sillas frente al escenario o la zona habilitada para la zona de pie, no dejaron de cantar y vibrar a cada frase de Julio y a cada éxito que interpretaba.
El Recinto Ferial contó para esta velada con una iluminación y sonido elegidos por el propio artista, que ofreció más de dos horas de concierto donde Julio Iglesias volvió a traer a la Isla su repertorio de nuevas, pero también clásicas canciones, de una discografía realizada durante 40 años, porque en 2008, el cantante cumplirá 40 años sobre los escenarios, desde que aquel joven que iba para portero del Real Madrid decidiera dar un giro hacia el mundo de la canción tras una lesión.
Julio Iglesias volvió anoche a visitar Tenerife de la mano de Rolo Producciones y patrocinado por el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través de su programa Santa Cruz + Viva y el Cabildo Insular de Tenerife. Pero antes de que Julio Iglesias saltara sobre el escenario actuó Anissa Gathers, que ha sustituido recientemente a Xiomara Laugart para encarnar a la mítica reina de la salsa, Celia Cruz. Con un estruendoso ¡Azúcaaaaar!, la artista interpretó dos temas de la recordada artista cubana para calentar los motores del respetable que prácticamente ya había ocupado casi todas las plazas en las gradas y la sillería.
Luego le tocó el turno a Julio Iglesias, quien no dudó en recordarle a quienes habían asistido a verle y, sobre todo escucharle, que Tenerife y Canarias es "uno de los rincones de España que siempre llevo en mi corazón, porque en esta tierra me siento como en mi casa". Y es que al sempiterno Julio, "le va Tenerife", como recordó en los intervalos que precedían a cada canción.
Cuando el artista terminó de interpretar su primera canción y dijo que "esta noche quiero recordar a esos canarios bellísimos que desgraciadamente han perdido la vida hace tres días" el público le respondió con una sonada ovación y se ganó, de ahí hasta el final de la noche, el corazón de todos. Julio no perdió la ocasión, antes de su tercer tema, para decir que "quiero decirles algo que muchos no saben y es que, hace muchos años, cuando yo era un chaval, venía mucho a veranear a Tenerife: me encanta esta Isla, los tinerfeños y los canarios", pudo escuchársele antes de que el público tapara su voz con los aplausos.
Y no hubo dos sin tres, ni tres sin cuatro ni cuatro sin cinco... las veces que el artista hacía referencia a la Isla hasta que llegó eso de "Tenerife, me va, me va, me va!".
2 comentarios:
“JULIO IGLESIAS LIVE 2008 - 40 ANIVERSARIO. TENERIFE. ISLAS CANARIAS”
“¡Tenerife, me va, me va…!”
22.15. Se apagan las luces en el recinto de Ferias y Congresos de Tenerife completamente abarrotado de público. Silencio. empieza un intro donde los músicos de siempre y los nuevos que siguen al crooner demuestran por qué están encima del escenario con él: Son de otro mundo. El sonido perfecto y las luces diseñadas para este Live 2008 40 Aniversario, un alarde de técnica y gusto exquisito. Sale a escena dejando ver su peor perfil, el que no le gusta y junta sus manos para arrancar con una versión dulce de Quijote donde casi recita en vez de cantar, pero es que hay que recitar claro “tengo miedo de las gentes que hablan, que opinan de más” y a buen entendedor, pocas palabras... “Buenas noches Tenerife, buenas noches Canarias”. Dedica la actuación a las familias de los fallecidos en el trágico accidente de avión en Madrid, “a los que sufren…” Y empieza Ni te tengo, ni te olvido, con ritmo lento, con pausa, voz fuerte y quebrada… Luego viene La gota fría donde la música pregrabada desluce un poco el tema. Échame a mi la culpa mete al público de más edad en el bolsillo y las siete islas cantan mientras él dirige desde el escenario. Ae, ao hace que la gente se levante, que cante, que den palmas, que bailen y él, como perfecto anfitrión, juega con sus gestos y deja que los sonidos del tema de Tony Renis le envuelvan… Se quita la chaqueta, se la pone, se abraza, sonríe, seduce… “No se pueden imaginar la energía que me dan ustedes… Yo vivo por ustedes. Ay Tenerife, Ay Canarias, la Canarias que mi padre adoraba tanto, la canarias de mi Tenderete, mi programa favorito de Televisión”. Y entona Un canto a Galicia y un joven gallego se levanta y le grita “¡gallego, gallego!” y unas filas más atrás “¡La Palma bonita!” y un niño grita “¡Las Palmas!”… Pregunta: “Ça va bien le son?” y un francés le contesta: “Très bien”. Y es que el sonido era perfecto aunque cierto periódico dijera lo contrario (más de lo mismo con Julio Iglesias). Lo cierto es que había gente de muchas islas; gente de Madrid, gente que había cruzado el charco desde Barcelona sólo para verlo; croatas, alemanes, ingleses, italianos, franceses; un joven argentino que por quedarse un día más al concierto, debido al aplazamiento por duelo, quizás haya perdido su trabajo, pero que lo había visto cantar en el Monumental de Argentina ante 80.000 personas hace muchos años y ahora quería regalarse la cara de felicidad de su pareja al estar cerca de él. Y llega All of you, con Wendy Moten… Y ella demuestra su poderío y quiebra su voz, juega con ella… Y él la sigue, y despliega su fuerza y se quiebra a propósito, pero ya se encargaran de decir mañana que a “Julio le falló la voz”. Todavía hay gente que no entiende de matices. Ni siquiera saben que Wendy Moten es una artista americana excepcional que esta noche ha estado en Tenerife haciéndole los coros al cantante latino más importante de la historia y que ella no necesita hacerle los coros a nadie: No tiene complejos como la prensa española… Y llega Caruso. Silencio. Su voz arriba y abajo, nítida y rota a la vez. Una canción soberbia ante un no menos soberbio silencio en el recinto. “Quizá esta noche sea el concierto más especial de España, quizá el más especial de mi vida… Nunca se sabe”. Y De niña a mujer cantada desde dentro de lo que significa ser padre. Y la gente que lo ovaciona antes de terminar... Always on my mind, eterna como Nelson… Siguen Me olvidé de vivir y El amor. Hay que hablar de sexo… Y entre juegos de palabras empieza A medialuz y salen los campeones de Tango del mundo demostrando por qué son número uno siendo dos. Al terminar los piropea. El público pide una u otra canción de estos 40 años que se han ido volando… Cuenta entonces la historia de Jacques Brel con Tenerife y le canta Ne me quitte pas ante un público que ni pestañea…Vuela amigo, vuela alto de Manuel Alejandro y desde el escenario suelta la frase, “lección de vida, lección de vida”. Estaría pensando en esos amigos que ahora se han apuntado a la modalidad de critica a Julio aunque no digas la verdad… Hey, muchas mujeres se levantan ante uno de los temas que mas ha vendido en la historia de la música de este país. Y en la última estrofa apostilla “sabia verdad: es siempre más feliz quién más amó y ese siempre fui yo”… Baila morena, jalea a un público cada vez más volcado. No está siendo un concierto multilingüe a gran escala. Este concierto es de aniversario para el público español y eso se nota. No hay canción en portugués, por poner un ejemplo… Pasa el tiempo y se le ve entregado, feliz con su público. Sigue con su repertorio y hace un amago de despedirse con Me va, me va; ese tema de ayer, de hoy y de siempre porque siempre se luce en los arreglos, en el ritmo. Las fuerzas de seguridad frente al escenario empiezan a verse desbordadas pero todo vuelve al orden del principio cuando sale de nuevo al escenario. Let it be me, Soy un truhán-soy un señor, Que no se rompa la noche con palmas y acompañamiento del público… Lleva cerca de dos horas de concierto y lo dirige todo con el saber hacer que sólo dan los años. Piden desde el público Crazy y en un inglés isleño la gente le acompaña… Can’t help falling in love de Elvis. Lenta, rápida, con magia, cambiando el ritmo; su voz potente sin la orquesta y la del público complementadas en una noche que toca lentamente a su fin; poco a poco convierte la balada de éxito de Elvis en una canción de una fuerza y potencia desconocida en ninguna versión hecha hasta ahora. El público se abalanza sobre el escenario y empieza la Julio pasión de sus admiradores/as de todas las edades y de todos los continentes. Y él lo sabe, como sabe que eso molesta a los pseudoperiodistas de este país. El no canta para imitar a Elvis. El canta para hacer mas grande a Elvis y a otros. Y lo puede hacer. Es el único artista que junto que con el rey del rock y los Beattles ha tenido seis canciones en la lista Billboard americana a la misma vez, pero en un país dominado por la envidia eso no se dice. Él fue el primero en abrir puertas en Estados Unidos y a su edad es, ante todo, competitivo. Piropos a las islas, piropos a Tenerife, a los chicharreros. Se va, vuelve… Me va, me va de nuevo con un saxo que parece que va a romper los cristales del recinto… Deja caer su pecho sobre la banqueta y se arrodilla “Me va, me va, me va, me va Tenerife… Adiós Tenerife, adiós Canarias”… Se va y su director de siempre se va al centro del escenario a bailar con los últimos acordes del concierto. Se apagan las luces. Han sido casi dos horas de concierto… Se apagan las luces…
Rolo Producciones impecable. No ha habido merchandising y el club de fans desaparecido. De ellos mejor no hablar…
fronteras
Julio Iglesias, Cantor Gallego Universal
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